Capítulo 10: A Dios Rogando...

...y Biblias arrojando. Me ha parecido bueno esperar a estas fechas tan señaladas para hablaros amiguitos de una vertiente dentro del rock, el Christian rock o White Metal. Siempre ha habido una asociación entre el rock y el diablo, ya lo decian los Barón Rojo, "Los rockeros van al infierno", y todas esas leyendas sobre guitarristas que vendian su alma a Satan para tocar de bolas (aplicable tambien a los bluesman).

Pero toda acción tiene una reacción, y si como exponente de la relación rock - Diablo esta el Black metal y derivados, existen tambien cristianos que tambien sienten el metal en sus venas (pero metal limpito), cuyos máximos exponentes serian los Stryper.

Esta gente, además de ser cristianos, eran fans irreductibles de la Abeja Maya, como podemos observar por su look combinando el negro y el amarillo. Pero que no os cieguen sus ropajes y su actitud, la música molaba, y más aun si no entendias la letra (a no ser que te guste el rollo "White" que ahí no me meto) Pero por lo demás cumplian los parámetros del "Hair metal" de la época: peinados tipo "Suprema de Mostoles", mallas, pintas extrañas, etc.

Se dice que Maya emprendió acciones legales contra los Stryper por plagio de su imagen. El grupo salió absuelto con la ayuda de Dios.

Creo que todo eso debio de ser un problema alguna vez, es decir: son heavies, cristianos y visten como espantajos y mariquitas (como todos los grupos de aquella época que tanto me apasionan...¿Seré raro?) Seguro que en las iglesias tampoco les dejaban entrar...o al menos no en las iglesias del sur de la "America (del norte) Profunda", donde lo más "moderno" que debian ver era que alguien no tuviera relaciones sexuales con su propia hermana (toma topicazo)

¿Se convertirá este en el nuevo uniforme de la Guardia Suiza?

Pero en cualquier caso, esta gente triunfaron en su momento y siguen ahora en activo, tocando incluso hace poco en España, donde volvieron a tirar Biblias desde el escenario al público siguiendo su tradición. Dado que fue en un festival y estamos en España, más de uno utilizaría las páginas al quedarse sin papel para cigarritos de la risa. Descarao!